Perspectiva
- Wenly Coste
- 15 jul 2020
- 4 Min. de lectura
Actualizado: 1 sept 2020
Vive tus procesos... Si hay algo que he descubierto en mi búsqueda de la paz interior; es esto, todos tenemos múltiples situaciones que representan un reto inmenso a nuestros más grandes temores y paradigmas, siempre que queramos crecer, mejor o tener paz tendremos que salir de nuestra zona de comodidad y exponernos esos grandes conflictos, a esos grandes retos y hacer las paces con esta realidad nos dará mucha perspectiva, que a mi entender es la clave para la vida.

La pandemia trajo consigo muchas cosas malas; mucha incertidumbre y ansiedad, todos pasamos por algún episodios de miedo o pánico, hay quienes perdieron familiares, empleos, oportunidades, negocios, dinero, planes y hasta sueños, pero la pandemia también trajo consigo muchas otras cosas muy muy buenas; tiempo para bajar la velocidad con la que vivíamos nuestras vidas, más horas en familia, descanso de muchas actividades y compromisos y en mi caso una de esas cosas fue perspectiva. (Si, así, muy como en Ratatouille, cuando Ego, el crítico gastronómico, ordena en el restaurante de Gusteau). La magia de la perspectiva es que puede renovarse con solo cambiar el punto de referencia de la percepción, digamos que con solo cambiar la mirada de lugar, basta para que ya tengamos un nuevo paisaje, listo para explorar y es justo eso lo que me paso a mi, durante la gran sacudida que nos ha dado los últimos meses.
Aparentemente para mi, todo en mi vida estaba bastante bien, tenia muchas cosas por las cual agradecer, tenia muchas cosas en las que mantenerme ocupada y tenia muchas otras en las que planeaba ocuparme a lo largo de este año, confieso que al inicio de todo el tema de la cuarentena yo no me sentía nada preocupada por las cosas que iban a suceder, pero al ir avanzando la situación, también fue avanzando ese gusanito que se le mete a uno y lo va inquietando para seguir creciendo, y con el paso de los días me fui dando cuenta que aunque estaba muy activa y enfoca en muchos proyectos, las cosas que eran verdaderamente importantes para mi, no estaban en primer lugar en mi lista de prioridades, entonces si empece a preocuparme, entonces si me entro la ansiedad y empece a dar mente y sentir como si hubiese estado perdiendo mucho tiempo que jamás recuperaría, mi yo natural arranco como loca hacer planes y poner en marcha mil y una cosa, para rápido y a lo loco y evidentemente, cuando esos planes no pudieron arrancar y no empece a ver los resultados que esperaba, entre en un estado de desesperación y desaliento.
De pronto mi productividad y buen animo se sintieron en peligro y durante unos pocos días me ahogue en planes, búsqueda de ideas, investigación, reestructuración de mi vida y por supuesto, la vieja confiable; la comparación, en medio de mi torbellino de cambio, caí en algo que nunca me ha gustado hacer; medir mi vida con las reglas de la vida de otros, me encerré en un circulo de observación equivocado, y al prestar tanta atención a los resultados de los que estaban a mi alrededor y no a sus procesos, me hice pensar a mi misma, muy ingenuamente que yo estaba super mal, que había estado haciendo todo mal durante mucho tiempo y solo Dios sabe cuantas cosas más pensé estando ahí dentro. Estando en el fondo de uno de mis juicios más profundos, Gracias a Dios me llego un poco de luz y recordé que me había estado saltando un paso muy importante en mi punto de quiebre; reconocer mi presente, fue cuando la perspectiva me salvo la vida y me di cuenta de que si había un error en mi método.
Había estado enfocando mis energías, en obtener los resultados de un proceso que Yo, no estaba viviendo, y ese es un gran error, porque es justo cuando vivimos nuestros procesos de manera cociente y personal, que podemos empezar crecer y cambiar lo que nos incomoda, sanar y evolucionar , no fue hasta que identifique que; ni mi pasado, ni mi futuro eran los que estaban afectando mi vida, que pude reenfocar mis energías, dejar de usar parámetros externos y comparaciones y usar como parámetro, lo que hoy por hoy es la clave de todo mi proceso de paz y crecimiento, mi presente.
Poner las cosas en la perspectiva me permitió dedicarme el tiempo que necesitaba para organizar mis prioridades, entrar en un proceso de cambio donde puedo hacer planes futuro, usando lo que ya mi pasado me había enseñado, sin descuidar mi aquí y mi ahora que es lo mas importante, y aunque es un proceso, que aun esta en curso y que va fluyendo junto con migo, que va creciendo y adaptándose, debo reconocer que darme la oportunidad de cambiar la perspectiva y vivir este proceso me ha regalado un dulce bocado de esperanza y seguridad en medio de lo incierto.
Y esto es lo que espero regalarte hoy, la oportunidad de que te evalúes desde una realidad única y personal, sin prejuicios y comparaciones que te apresuren a terminar tus procesos antes de lo necesario, para perseguir y ver los resultados de otros, en ti. Sino que puedas tomarte el tiempo y el cuidado de formar dentro de ti, todo lo necesario para que puedas alcanzar la plenitud, que puedas construir planes sostenibles para tu futuro, sin juzgar, ni arrepentirte de tu pasado. Que hagas las paces con lo que te ha tocado vivir y aproveches todo eso para que edifiques la base de todos tus planes y sueños, tu vida hoy.
con amor,

Comentarios